Choy Yong Sul

Choy Yong Sul

El Gran Maestro Choi Yong Sul (1904-1986) es considerado el fundador del Hapkido, su vida no fue nada fácil y está cargada de controversia, misterio y aventuras. Aquí solo se relatará una versión que puede ser la más aceptada de la misma.  De origen Coreano, nacido en Chungbuk en 1904 era huérfano y de pequeño con ocho años de edad fue llevado a Japón durante su periodo colonial por un matrimonio de comerciantes japonés que lo quería adoptar. 

A los tres años de su llegada, el niño no se adaptaba bien teniendo un carácter difícil, cosa que hizo que el matrimonio lo abandonara a un templo Budista que se encargaba de otros niños huérfanos como él. La estancia que por dos años estuvo allí no fue fácil por su carácter y el monje encargado del templo lo llevo a casa de un amigo suyo para preguntarle si se quería hacer cargo del niño.

Esta persona no era otra que Sokaku Takeda, maestro de artes marciales del estilo Daito Ryu Aiki Jutsu famoso en todo Japón y descendiente de un linaje Samurai de muchas generaciones, que lo aceptó y le convirtió en su ayudante tanto a la hora del servicio de su casa en calidad de mayordomo, como discípulo y ayudante en el entrenamiento y las clases que ofrecía de artes marciales. 


Choi estuvo con el maestro Takeda hasta su muerte, en 1943 y al finalizar la segunda guerra mundial regresó a su Corea natal casi sin recordar nada de su país y de haber perdido casi la práctica de su idioma, ya que tenía prohibido hablar en coreano y de manifestar sus costumbres durante la estancia en Japón.  

Sokaku Takeda

Al llegar, se interesó por diferentes artes marciales tradicionales coreanas y las practicó por algún tiempo, como el Taekkyon o el Subak y mientras tanto encontró trabajo de vendedor de dulces para poco después ser criador de cerdos en la ciudad de Daegu. Hasta que un día hubo un incidente en una fábrica de licores donde siempre se agolpaban varios criadores en busca de turba del grano sobrante de la fabricación de cerveza y se desencadenó una pelea, Choi con su habilidad pudo repeler fácilmente sus atacantes.

Desde una ventana de la fábrica Seo Bok-Seob, que era el hijo del gerente, vio la pelea y quedó impresionado, en aquel momento era practicante de Judo cinturón negro primer Dan, mandó a buscar al maestro Choi pidiéndole que le entrenara. 

Habilitaron una estancia en la fábrica para poder practicar allí, más con algunos trabajadores de la fábrica, comenzaron los entrenamientos. Algún tiempo después pasaron las clases a casa del Maestro Choi en una habitación acondicionada. Con los años el Maestro con sus primeros alumnos dieron a conocer el Hapkido primero por la ciudad de Daegu para luego establecer un Dojang en la capital, Seúl y finalmente con los años y las diferentes promociones de instructores por todo el país.